Este es un postre rápido y fácil de hacer y queda bastante lucido. Se le pueden hacer variaciones dependiendo de lo que tengáis en la nevera. Originalmente es con mascarpone, pero yo a veces le añado yogur griego a partes iguales y queda más suave. Algunas recetas de Tiramisú llevan nata montada, a mí particularmente no me gusta. Probad ésta y me decís.

Ingredientes (5 personas)

-Queso mascarpone 500 gr (ó 250 de queso mascarpone y 250 gr de yogur griego)

-Leche condensada 6 cucharadas

-10 bizcochos de soletilla

-150 ml de café

-6 yemas de huevo

-Cacao en polvo

Preparar el café y enfriar. Batir las yemas con el queso y la leche condensada (si no tenéis podéis echarle azúcar al gusto), no lo hagáis con la batidora, os puede quedar muy líquido. Para montar la copa, colocar un bizcocho de soletilla en la base y mojarlo con el café (no lo empapeis demasiado), echar una capa de la mezcla de queso, otra de bizcocho y acabar con otra de queso. Espolvorear con cacao puro, ayudaros con un colador. Dejad enfriar en la nevera y servir.

Si sois muchos  queréis hacer una fuente recordar no mojar demasiado los bizcochos en el café porque os quedará muy líquido. Yo en vez de meter el bizcocho en el café lo humedezco con una cuchara. Y si tenéis niños hacedlo con café descafeinado.