Receta tradicional, ideal para comer como plato único y no pasarte todo el día en la cocina. Estos días de confinamiento, y en mi caso, con tanto trabajo he repetido este plato todas las semanas para aplacar a mis fierecillas y no tener que pasarme todo el día en la cocina.

Ingredientes ( 6 personas)

-1 kg de carne de morcillo troceado

-3 patatas

-3 zanahorias

-1/2 calabacín

-2 dientes de ajo

-1/2 cebolla

-1/2 pimiento rojo

-100 ml de vino blanco

-1 cucharada de pimentón dulce

-aceite de oliva

-sal

-1 litro de caldo o agua aproximadamente

Poner en una olla de base ancha y alta aceite de oliva. Dorar a fuego fuerte la carne para que quede bien sellada. Retirar y reservar. En ese mismo aceite sofreír el ajo, la cebolla y el pimiento rojo bien picadito unos 10 minutos a fuego medio. Añadir la carne, el pimentón dulce y remover. Añadir el vino blanco y subir el fuego para que se evapore. añadir el agua o caldo hasta cubrir la carne, tapar y cocinar a fuego fuerte una hora aproximadamente.

Pelar y cortar las patatas en cubos (recordar que para que suelten luego el almidón no cortar todo con el cuchillo, la última parte hacerlo sin el). Pelar las zanahorias y cortarlas en rodajas. Lavar el calabacín y sin pelar partirlo en cubos.

Tras 1 hora de cocción de la carne añadir las patatas, la zanahoria y la sal. Volver a tapar y cocinar unos 20 minutos. Y por último añadir el calabacín y dejar otros 5-10 minutos más. Si os queda mucho caldo, colocar la carne y la verdura en una fuente de servir y dejar reducir la salsa a fuego alto.